Credo…

Este es mi credo. Aunque publicado, lo iré actualizando hasta sentirme tranquilo de obtener una versión que enmarque correctamente mi fe.

Sobre lo Divino

Creo en Dios Padre Todopoderoso, Creador del Cielo y de la tierra. Creo que en Jesús se culminan las mejores prácticas budistas para el convivir de los seres y para la fácil comprensión de quienes estamos en este lado del planeta.

Creo en el perdón de los pecados y en la vida eterna. Creo que la vida es vida, porque Dios así lo quiso.

Creo que las distintas iglesias se dejan los regalos de los tres reyes magos porque al final eso no se come, pero es más valioso que lo que aprendieron de Dios. Hoy por hoy hasta dudo de la Santa Iglesia Católica, Apostólica [y Romana].

Creo en el libre albedrío que entrópicamente lleva esta humanidad a un solo destino, lo cual ya fue predicho por Dios en las escrituras del Apocalipsis.

Humanidad

Creo que nuestro aporte individual es importante parte del progreso de toda la humanidad, para quienes así lo deseamos. Pero el cambio sostenible, tangible y evidente se da por la aglutinación de los esfuerzos individuales. No basta con que sólo uno diga desearlo y hacerlo.

Creo que la gran mayoría de los individuos son, como yo, consumidores de esta realidad efímera y merecen mi lástima, y hasta mi ayuda. Por eso busco ser mejor al imitar a mis héroes y revisar lo que los malos ejemplos dejan.

Creo que las desigualdades sociales son relevantes e impiden el mejor desarrollo de nuestra especie. Para reducir las diferencias se deben dar oportunidades a todos los que compiten por mejorarse. Los ganadores de cualquier competencia merecen su premio, pero los perdedores no deben ser castigados ni humillados, sino comprendidos para otorgarles alternativas, nunca regalarles fortunas.

Al ver a mis hijas crecer como un reflejo de esta humanidad, me doy cuenta que los pensamientos neo-liberales y derechistas son el estado mental de los infantes en su expresión adulta de egoísmo. Creo que quienes se conglomeran alrededor de estas ideales fueron vilmente engañados o no lograron superar su etapa infantil de egoísmo.

Creo que al mismo tiempo que muchos aprenden cómo ser mejores, las grandes mayorías aun permanecen en un estanco de baja dignidad porque unos pocos no queremos ayudarles, aun siendo consientes de los males aunados a ellos. La humanidad se encarga de mejorarse naturalmente y no se detiene a recoger lo que considera sus desechos, aun cuando sean otros seres humanos.

Creo en la libertad, la justicia y la solidaridad para el crecimiento humano en comunión con su ambiente.

Por medio de los medios de comunicación masiva muchos individuos toman decisiones conjuntamente y casi al mismo tiempo, se ha logrado el avance de algunos seres humanos de forma acelerada. Creo que por debilidades de formación los que sin investigación toman un medio de comunicación como verdad absoluta serán sujetos de mi diversión.

Creo que la humanidad no sería la misma sin la música sencilla y popular de The Beatles.

Sobre el Estado

Creo en el Estado regidor y ejecutor de las decisiones que benefician a sus ciudadanos. Creo en la transparencia del Estado por el bienestar y tranquilidad de los gobernados. Creo en el ordenamiento jurídico y combato la legitimidad de las acciones que considero injustas.

Creo que en el Estado excepcionalmente se presentan líderes con buenas intenciones, los demás tienen una agenda individualista y oportunista. Creo que el Estado sólo debe enfocarse en el futuro en pro del bienestar y mejoramiento de masas en el corto plazo, pero con sostenibilidad a la eternidad. Las revisiones del pasado son exclusivamente para evitar recaer en errores y mejorar lo logrado.

Creo que las comparaciones entre Estados son tan odiosas como la que hacen los padres entre sus hijos. Sencillamente las diferencias son demasiadas como para reducirlas en comentarios subjetivos que apoyan tesis mezquinas.

Creo en la función pública colegiada, no en la bien intencionada. Sin embargo, en estos días dudo que el mejor administrador de empresas del mundo sea el mejor dirigente de cualquier Estado.

Creo en el sistema de democracia presidencialista directa donde las masas acuden a votar por quien mejor les vendiera un cuento. La legislación se la sigo dejando a cámaras de representantes que voten por aprobaciones de leyes. Lastimosamente muchos postulantes a cualquier cargo de elección pública pasan del cuento a la mentira (ocultar también es mentir) y los masificados se apilan alrededor de planteamientos que no necesariamente comprenden.

Costa Rica

Creo que más gente debe leer y creer únicamente lo que se dice en los medios noticiosos de comunicación masiva, como La Nación. Entre más gente amansada exista, más posibilidades tengo de llegar más lejos en mi vida este país, pues esa gente me servirá de tapete en mi recorrer. Creo que sin Moracia este territorio estaría lleno de gente sin ninguna tradición.

Creo que como cualquier otro de los países del planeta, Costa Rica es específicamente particular. Se hace explotar el tema nacionalista en la gente sencillamente para que no se vaya.

Gracias a la pobreza de sus orígenes, el consenso ha sido una necesidad de quienes aquí moramos. Por eso vamos lento en cada solución pero firmes en el avance. Los que quieren apresurarse a sabiendas y consientes de cómo nos fundamos son los que leyeron La Nación y ya están domesticados.

Creo que a mí y a muchos como yo nos están cobrando bajos impuestos en el inicio de este segundo milenio (calendario Gregoriano). De este modo se resguarda el interés de una minoría que mantiene una idealización por el dinero y lo material, y necesitan sentirse exitosos por ese camino, dados sus fallos en otras áreas de la vida. Por eso ahora nos gobiernan quienes no han logrado saciar su necesidad por ver cifras grandes en cuentas bancarias.

De este lugar que me vio nacer, no importa la tierra, si no su gente, que ha sido moldeada por algunos caudillos con intensiones progresistas.

En Familia

Creo en la mínima expresión de la sociedad: la familia. Esta es la parte más pequeña en que puede subdividirse la humanidad manteniendo sus cualidades representativas, y a la vez se encarga de la formación de nuestros niños y niñas.

Al igual que la humanidad, la familia no tiene una definición étnica, religiosa, orientación política, relación biológica o cualquier otro matiz. La familia existe por la naturaleza de nuestra especie y la que amanece con calor en el oriente es comparable a la que se acuesta con frío en cualquiera de los polos de este planeta.

Creo que a mi familia nunca le voy a poder retribuir todo el agradecimiento que le debo por haberme formado. De igual modo, en mi jornada de paternidad también me entero que no recibir agradecimientos es el destino generalizado de quienes crían descendencia. No se debe esperar agradecimiento alguno.

De Ernesto

Creo que soy un mediocre y común ser en este paso tan fugaz por la vida. No lograré nada extraordinario para la humanidad.

Por eso quiero ser el héroe de mis hijas, para proyectarme al menos unas décadas más allá que lo que la naturaleza de la vida me permite. Que mi hija y quienes la rodean tenga la oportunidad de vivir mejor, envueltos en amor, lejos del odio y una pésima formación humana es el objetivo primordial en mi vida.

Creo que en muchas ocasiones hablo de más y cuando no debo. Soy lento para comprender las abstracciones de relaciones humanas a mi alrededor. Eso me ha deparado una formidable cantidad de vergüenzas y retracciones. De igual modo mi obsesión por informarme con noticias mundanas que no me llevan lejos o el pasar adicto frente a una computadora roba el tiempo que debo dedicar a las cosas realmente importantes, como reunirme con quienes ahora formo una familia.

Creo que como al ser humano más regular, el envejecer me ha sentado bien en la mente, pero mal en la imagen. Temo por mi futuro, uno corto, probablemente abatido por afecciones cancerígenas conseguidas por medio de la carga genética que acarreo.

En contra de las prioridades de algunos filósofos en la antigua Grecia, me encanta reír como niño cuantas veces pueda. Por mis comportamientos obsesivos tiendo a reírme mejor de quienes montan cólera con facilidad, pues son el plato sencillo para la carcajada.

Creo que le debo a Dios la oportunidad de vivir y compartir mi credo.

Un comentario sobre “Credo…”

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