Debo iniciar con una disculpa por falta de datos y, por ende, el trabajo incompleto que presento en el segundo cuadro. No contaba con que la «era digital» de nuestros periódicos en Costa Rica hiciera que no guardaran copias de muchas ediciones anteriores. La ayuda desinteresada para suplir el faltante de información (y su fuente) es bienvenida, por supuesto.

El primero es un cuadro comparativo de los resultados electorales de las últimas dos elecciones presidenciales en Costa Rica.

Según comprendo, para las elecciones en 2014 se aprobó una nueva reducción en el monto de deuda política que se destina a los partidos en campaña (por favor corríjanme si no es cierto). Por ende las pautas y signos externos han sido un poco más conservadores, creo.

Pero aquí viene la comparación numérica relevante. El gasto destinado para logística del mismo día de elecciones en las dos últimas instancias parece no tener una relación con respecto a la representación electoral de sus seguidores para un partido en especial…

Me surge, inevitablemente, la pregunta sobre el financiamiento del Movimiento Libertario. Si bien es cierto no ha pasado de ser un excelente tercer lugar en cada una de las últimas 4 elecciones presidenciales, este partido se ha dado el lujo de gastar en cada campaña y en el preciso día de votación como si fueran una consolidad segunda fuerza electoral.

Claramente yo no tengo el detalle de las justificaciones de donaciones y gasto para cada partido y tal vez eso sea el meollo de toda mi intriga. O, tal vez… desde hace 4 años para acá las notas sobre supuestos intentos de desfalco al Tribunal Supremo de Elecciones empañaron a un partido más que a los otros. A saber, el PLN está ligado un caso sobre una cuenta bancaria que dicen ser parte de “un esquema paralelo” de gasto. El PAC se ensució con el intento de cobro de facturas por servicios profesionales que no podían ser honradas.[10]

Pero el ML tuvo desde infusiones de capital sin aclarar, como el préstamo personal de la maestra Karla Gómez[11], pasando por el cobro de capacitaciones que parecen no haber ocurrido[12], hasta el allanamiento de locales del partido[13].

Me quedan las preguntas, únicamente: ¿Cómo hace el Movimiento Libertario para sufragar sus gastos de campaña cuando, por los resultados electorales finales, las devoluciones del TSE no son proporcionales? ¿Qué sistema de membrecía o donaciones tiene esta agrupación para reaparecer cada 4 años en campaña, libre de ataduras financieras? ¿Bajo qué criterios éticos puede un candidato a la presidencia nacional participar de elecciones con la sombra de graves acusaciones legales?

Y la pregunta para revisar en unos meses: ¿Qué sistema usará el ML en esta ocasión para cubrir el gasto de unos 3,200 millones de colones de su campaña electoral en 2014[14], cuando las donaciones ni los votos recibidos parece que le permiten cubrir ni un 10% de tal monto?