Jueves Octubre 7, 2004 – 1:02 pm
Alguna vez me preocupé por el momento de dar un salto al vacío, sujetado por una cuerda de seguridad. Ver al vacío, el viento en mi rostro, la emoción… ni la misma adrenalina me fueron suficientes para decidirme a hacerlo.
Pero el problema no es el vacío, ni el vértigo por el salto. No es el conteo para que saltes, no son los 2 ó 3 segundos en el lanzamiento. Mucho menos lo es el punto del salto. No. Todo está en el futuro para cuando lo piensas en ese instante. El problema es la desilusión del futuro, si la cuerda no me sostiene.
Pues la vida ha procurado darme la misma sensación de brinco al vacío una y otra vez. Claro que los escenarios han sido muy distintos. Algunos con peores probabilidades a sobrevivir que las que te da un bungee jump.
Mi familia ha desparecido. He dejado amistades morir. No he tenido dinero. Me he sentido tonto en público. He padecido hambre… pero a todo sobreviví.
Hoy sigo aquí, con mi rostro al sol, recibiendo el viento. Sin embargo estoy dispuesto a saltar. Mi adrenalina sube a la vez que me ruborizo. Desconozco el futuro, pero no temo padecer. Aun con las laceraciones creo que voy a volar. Hoy quiero alzarme en franco planeo porque tú estás conmigo… eso basta.
Te amo.
Ernesto
Pero lanzaaaate!!! ;)